Reflexiones de una Reina

A propósito del libro que terminamos de leer hace poco en la Casa de la Dona de Torrente: "Una Palabra Tuya"

Tú eres una reina

Rosario, nunca quiso ser Poliana, quizá la vida la despojó de ese don que hace que lo veas todo de una manera positiva. Como lo hace mi buena amiga Milagros, bueno, ahora me presento: Soy Carmen, y de las anteriores personas citadas, Rosario ahora no es amiga mía, en algún tiempo fuimos íntimas y por eso la conozco muy bien, quizá demasiado. Cuando eramos inseparables siempre me transmitía tristeza y me recordaba siempre que tenía que ser ordenada, trabajadora, limpia, a veces seria, correcta, delgada, alta, guapa, seductora, atractiva, inteligente, buena cocinera, cuidar de todo y de todos, tener un trabajo especial y femenino y sobretodo, esperar al "Príncipe Azul".
Pero hace unos años, conocí a Milagros, y comencé a querer ser como ella, salvando distancias y extravagancias. Nosotras somos supervivientes de la vida, y por eso la tomamos muy enserio con lo cual nos centramos y cultivamos mucho la amistad y sobretodo el sentido del humor, la lectura en grupo y hasta tenemos un grupo musical, a veces le digo: "Milagros, parece que tenemos un mundo aparte, pero que felices somos". Pero claro, a veces no podemos huir de convencionalismos y tradiciones y entonces llamamos a Poliana que nos acompaña en los momentos serios y oscuros de la vida, y gracias a ella, se hacen más soportables.
Por cierto, Poliana nos ha contado un cotilleo; nos ha dicho que el príncipe azul que esperamos se ha casado con una chica como nosotras y tiene dos hijas. Ya me lo decía Milagros: "Carmen, tú no serás princesa, tu eres reina, Reina de tu Vida"
Gracias a todas las Milagros que pasan por mi vida, pues con una palabra tuya, las nubes lejas se alejan.


Carmen Roig Silla, alumna del taller de lectura de Torrent. Profesora: Tatiana Lozano